5 consejos para decorar tu habitación de estudiante

El colegio y la universidad es sinónimo de una nueva vida, un nuevo ambiente y muchas personas por conocer. Una residencia académica es la mejor opción para comenzar y conseguir el empujón que necesitamos.

Elige bien los colores

Obviamente no te vas a poner a pintar la habitación, nos referimos a los colores que se van a utilizar por ejemplo, en la ropa de cama, y que van a condicionar casi por completo la sensación que transmite la habitación. Es por eso que debemos elegir aquellos tonos que ayuden a crear ambiente de estudio asociados a relajación y bienestar. Entre las tonalidades mejores para conseguir este objetivo se encuentran el beige, el azul turquesa o el blanco. Inspiran una sensación de felicidad y descanso que, además, favorecen la concentración.

Personaliza la decoración de tu habitación al máximo

Tu habitación puede ser un lienzo en blanco y tú eres el pintor. Es muy importante que el lugar en el que vas a pasar tanto tiempo tenga muchos toques personales. Para ello, puedes decorar los espacios libres con poster de tus grupos de música favoritos y dibujos o figuras que representen las cosas que más te gusta hacer. También puedes hacerte con un corcho y colgar en él fotos con tu familia y amigos. Esto te ayudará a no sentirte solo y a recordar los buenos momentos que pasas con esas personas.

¿Conoces la aromaterapia?

No todo es colorterapia: muchas veces son los olores los que nos traen muchos recuerdos y sensaciones. Una buena forma de sentirse como en casa es utilizar el mismo ambientador. Este, además, puede ser un elemento decorativo ya que hoy en día existen diseños muy sofisticados. A parte de proporcionarte calma y decorar, dará a tu habitación el toque que necesita.

Incluye objetos de tu casa

Para que el cambio no sea tan notable puedes trasladar objetos que ya tenías en tu habitación y colocarlos en tu nuevo hogar. Figuritas, clasificadores, flexos, botes para meter bolígrafos y todo tipo de objeto es válido. De esta manera te sentirás más cómodo y a gusto con el ambiente ya que te recordará a la habitación en la que has pasado toda la vida.

Optimiza el espacio

Te ayuda a ser independiente, responsable y a optimizar el espacio y el tiempo. Tus padres dejan de estar persiguiéndote por casa para que recojas y tengas todo ordenado. Ahora eres tú el único responsable de tus actos y tu comodidad. Busca los mejores trucos para optimizar el espacio y que te quepa toda la ropa, libros y objetos que has llevado a tu habitación. Aprovecha las puertas para añadir perchas y usarlas para dejar ropa y complementos. Debajo de la cama coloca cajas que te resultarán muy útiles como almacenamiento.